25/10/2021
Cualquier negocio puede sobrevivir por inercia… pero será más fácil que lo haga si se sumerge en un proceso reflexivo, que lo conduzca a conocer qué es lo que quiere ser en un futuro.
Un negocio que se inicia, uno que presenta problemas de solvencia o simplemente uno dirigido por gestores diligentes debe saber hacia dónde se dirige y respaldar su proyecto con un plan financiero sensato.
Esto es aplicable a cualquier actividad (incluso a las finanzas personales), a una multinacional, pero también a una PYME.
En estas últimas, el día a día arrolla al empresario, que se centra en campos de la gestión empresarial alejados de su cometido principal y de sus habilidades. Pero ello no es compatible con dejar de lado la planificación financiera de su negocio.
Y tú… ¿ya sabes hacia dónde se dirige tu negocio? ¿ya sabes con que recursos financieros cuenta para ello?
